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Caza y pesca: mi experiencia en la Comisión de captación de miembros y los trabajos de cooperación de la AMABPAC

Caza y pesca: mi experiencia en la Comisión de captación de miembros y los trabajos de cooperación de la AMABPAC

                                                                       Leticia Ruiz Rivera*

Biblioteca Eusebio Francisco Kino de la Provincia Mexicana de la Compañía de Jesús

“En la pesca, el nombre del juego es la paciencia”

Dicho popular

 

Próximamente la Asociación Mexicana de Archivos y Bibliotecas Privados de México, A. C. cumplirá 25 años de vida. Para las instituciones visionarias que iniciaron esta aventura debe ser alentador y satisfactorio a la vez, darse cuenta que su apuesta al trabajo conjunto con la cooperación interinstitucional como bandera, los ha llevado a transitar juntos durante este respetable periodo de tiempo. Escribo esta nota retomando una ponencia[i] que presenté en Monterrey en 2014, en el marco del Congreso Nacional de Archivos y Bibliotecas Privados, en donde me permití resaltar la importancia del trabajo colaborativo, pues como lo dije entonces, para mí la cooperación tiene un especial significado porque abarca muchos aspectos: debemos trabajar juntos para alcanzar ciertos objetivos, manteniendo al mismo tiempo nuestra autonomía, sin subordinación entre los miembros sino un deseo común de conseguir los fines que se plantearon,  estableciendo redes de interrelaciones entre sí, todo esto con un componente de equidad y solidaridad mutua, y de sentido de pertenencia al grupo. Cuando se trabaja en colaboración se aprovecha más la diversidad de habilidades, destrezas, conocimientos, cualidades, recursos, etcétera, de los miembros del grupo. En el caso de la AMABPAC, tenemos claro que la cooperación está basada en los siguientes aspectos:

  1. Fomento del trabajo en equipo.
  2. Intercambio de conocimientos.
  3. Fortalecimiento de la imagen institucional.
  4. Ayuda y asesoría mutua para una mejor toma de decisiones.
  5. Difusión de las labores que realiza la institución.
  6. Aprendizaje compartido de riesgos y errores.
  7. Reutilización de modelos exitosos de trabajo.
  8. Persecución del bien de todos.

También existen algunas áreas de oportunidad en el trabajo cooperativo, aspectos que no debemos perder de vista para aprovechar mejor nuestras diferencias y que éstas no se conviertan en desventajas, por lo tanto también estamos conscientes de que para cada institución, los ritmos de trabajo son diferentes y las prioridades no son las mismas para todos, lo que puede frenar el desarrollo de los proyectos; la toma de decisiones puede ser compleja y lenta, o bien la burocracia de algunos cooperantes puede entorpecer el accionar del grupo, además de que muchas veces algunos trabajan más que otros.
Pero por fortuna, en la AMABPAC y tras casi 25 años de funcionamiento, hemos aprendido mucho sobre el trabajo colaborativo, compartiendo responsabilidades sobre los proyectos que emprendemos, olvidando protagonismos institucionales y/o personales, al mismo tiempo que tomamos conciencia de lo que significa un proyecto de cooperación, así como la responsabilidad y los compromiso que se adquieren. Tomamos en cuenta y respetamos que cada uno de nosotros o cada institución tienen su propia manera de hacer las cosas y que hay variantes en las formas de hacer la misma tarea. Tenemos diferentes marcos de referencia, maneras de ver asuntos y problemas, diferencia de recursos, infraestructura, conocimientos, diferentes valores personales y estilos de vida. Las instituciones  son diferentes, pero eso no nos hace “mejores” o “peores” que el otro, más bien contribuye a establecer formas de trabajo conjunto.
Estamos conscientes también de que la mayoría de los proyectos de cooperación son de larga duración, por lo que se trata de una inversión a largo plazo. Tenemos un compromiso institucional hacia un objetivo común y lo que sea mejor para nuestro archivo o biblioteca y para la Asociación. Por ello participamos con ánimo en la planeación y en la implementación, involucrándonos y haciendo nuestros los proyectos, de manera que todos apoyen los resultados. Entendemos que una buena relación no significa que todos estarán siempre de acuerdo y practicamos las reglas de cortesía, respeto, valores y construcción de la confianza. No nos enfocamos en lo que está mal o en lo que necesita corregirse, sino en lo que se necesita para el éxito. Nos congratulamos con los logros de los miembros de la asociación así como el éxito de la AMABPAC misma.
Todos estos factores que tras el paso del tiempo, el trabajo conjunto y la actitud positiva, que en mayor o menor medida hemos logrado limar, refinar y superar, son visibles en los casi 25 años de vida de la Asociación. Nuestros trabajos de cooperación están encaminados principalmente a la difusión de nuestros servicios y colecciones; la edición y producción de contenidos; las exposiciones; el intercambio de conocimientos; la organización de congresos, conferencias y presentaciones de libros, la asesoría y capacitación de personal, y la promoción para la investigación.
Con todos estos atributos a favor, el trabajo de “caza y pesca” de nuevos asociados debería ser sencillo, sin embargo, hasta ahora el mayor número de las instituciones participantes residen en Ciudad de México, pues hemos logrado sembrar pocas semillas en el resto del país; el crecimiento hacia los Estados nos permitirá consolidarnos como una agrupación más completa, así que falta mucho por hacer. Como digo, el reto para la incorporación de nuevos asociados no es menor. Se trata, por así decirlo, de enamorar a otras bibliotecas y archivos para que se unan a nuestro esfuerzo, resaltando las virtudes del trabajo en equipo, los logros alcanzados en estos años y los que faltan por alcanzar.
Como en el deporte de la caza y de la pesca, debemos ser pacientes y perseverantes y estar en constante búsqueda de instituciones afines que se interesen en lo que hacemos y que cumplan con los requisitos que marcamos para su incorporación a la Asociación. Con todo, es un honor trabajar para el crecimiento de la AMABPAC, pues es una agrupación con muchas fortalezas que han ido aumentando con el paso del tiempo y con la suma  de los asociados, con toda certeza día a día seguimos nuestra maduración, creciendo como grupo y aportando a la sociedad.
*Directora de la Biblioteca Eusebio Francisco Kino de la Provincia Mexicana de la Compañía de Jesús.
Mi agradecimiento a la artista Laura Favila Corona por cederme su obra “Pescando” que ilustra esta nota.
[i] Esta nota es un resumen de: “Entretejiendo caminos: reflexiones en torno a la cooperación” en Congreso Nacional de Archivos y Bibliotecas Privados: Los esfuerzos en el rescate y la conservación de archivos y bibliotecas privados de México en el marco de festejos por el vigésimo aniversario de la AMABPAC (Monterrey, AMABPAC, CEEGS, 2014).

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